Esta tarde



Hay tardes así.
Me urge terminar una pàgina
pero me distrae una hormiga
errante y salida de cauce,
¿raro, no? ,
que trepa por el filo, justo, de mi ventana

miércoles, 25 de febrero de 2009

Cambià de historias

_Lei lo tuyo._la frase me sorpendio cuando habia puesto un pie sobre la Independencia para cruzarla en diagonal , como no se debe. Me di vuelta, era Gòmez, el flaco Gómez, no lo conocia demasiado, pero como todos en mi ciudad , no podia imaginarme el cafè de esa esquina sin su larga presencia , que mudaba de afuera hacia adentro según la estación. La tardecita de enero, o la prohibicion del cigarrillo ,o ambas, lo condenaban, ese dìa, al exterior. Desde su mesa solitaria me habia hablado. Dudè en volverme ,pero la carne es dèbil y que uno màs hubiera leido mi esquelético librito de reciente publicacion , pudo con mi vacilacion , si la hubo.
Que mina triste _ agregò_ sentate.
Cómo? _le dije_mientras arrimaba una silla y daba por tierra con mis pruritos.
Sì, vos, que mina triste_repitio con una seguridad que no admitia réplicas_nunca una buena en tus historias .
Mirà - le dije-intentando una amabilidad a la que me obligaba la buena educaciòn, y que estaba lejos de sentir _ las cosas no me pasan a mi, sino a mis personajes.
Mmmm_y revolvio el cafè con aires de filosòfo alicaído _sin embargo…_y dejó la cucharita sobre un plato , en el que tambièn estaba apoyado su cigarrillo a medio fumar , la ausencia de una etiqueta y de bolsillos en su remera me hizo suponer que ése provenía de la generosidad de alguien que habìa pasado, sin dudarrlo hundi los mios en la parte mas profunda de mi cartera.
_Estás equivocado. No voy a discutirte que hay alguna cosa mia, es decir que deviene de mis experiencias, en los cuentos, pero, lejos de lo que vos decís , yo…_ me interrumpì, no iba a decirle a un extraño, que, despues de todo ( después de qué?), yo me sentía gloriosa en el amor y en la vida.
Mirá_seguia, acariciandose la barba descuidada y con el tono mesianico con el que habia iniciado la conversacion_yo podria contarte tanto_y sin esperar ni el menor gesto de atencion empezó, no se si para mí o para él _ mi primera novia era del barrio Cihacarita, teniamos quince y yo le compraba conjuntos de ban lon _ te acordàs? _ si, me acordaba _si habré gastado, al final se quedó con mi primo , iban juntos al secundario y una cosa trajo la otra.
Movio el pocillito en un movimiento exasperante , como para reunir las últimas gotas del café frío, lo bebiò, y siguio ante mi silencio, que esa altura no sé a qué obedecía_ Después me fui a Mendoza un tiempito , ahí me enamorè de una morochita, muy linda piba. Ella tambièn me queria mucho , pero se metieron los viejos, ¿viste como son esas cosas?_sì, habia visto_y al final la convencieron.
Sin dudar de que iba a seguir el hilo de su relato , entornó los ojos y ensayando una mirada de tanguero en desgracia, siguio como si nada_ Después estuve un tiempo solo hasta que se me cruzó Beatriz , que metejon , que metejón.¿Tenès un cigarrillo?_ No. No tenía Eso no lo amilanó _Con ella me hubiera casado , habia empezado a hacer algo en un terrenito de mi tìa , pero no sè, nunca supe bien , un día empezó con que no estaba segura, que le diera un tiempo y se fue a trabajar a Cordoba , le habian conseguido un traslado en el mismo banco , el gerente se iba y la queria de secretaria, era capaz, muy capaz_decia mientras encendia un cigarrillo que le habia pedido al mozo.
La pausa me daba el tiempo justo como para levantarme, sin embargo , como adivinando mi intencion, agregò_ahora no hay nada serio , no es que no haya nada de nada ,_añadiò como para dejar a salvo el orgullo _ uno picotea , pero con esto de que cuido a mi vieja no es fácil, las mujeres no entienden , son bichos raros, eh?
_Nosotras? _ me puse el bolso al hombro como para no dar espacios, me levantè , acomodé la silla y reuniendo los atisbos finales de una paciencia que me es ajena, concluì_ rarisimas.
Mientras repetìa el trazado de mi cruce de calle, escuché_Chau, che, muy bueno lo tuyo, pero triste, eh?